Grande fue la gracia de Dios
Que mostró a mí, pecador;
Tierno fue el amor de Jesús,
Pues su sangre El derramo.
Gracias, oh mi Dios, yo te doy;
Vengo a tu presencia con fe;
Lávame en tu sangre, Señor,
Y más blanco que nieve seré.
CORO
Lávame, Señor; lávame, Señor;
Lávame en tu sangre, Señor,
Y más blanco que nieve seré.
Padre, contra Ti yo pequé,
Ten de mi, Señor, compasión,
Que tu santa ley traspasé
Y merezco la perdición.
En el mundo yo me perdí
Porque del redil me desvié;
Lávame en tu sangre, Señor,
Y más blanco que nieve seré.
Triste fue su muerte cruel,
Y la cruz su cuerpo rindió
Grande fue el dolor que pasó,
Mas en vano no padeció.
Mi pecado a El confesé,
En su sacrificio confié;
Lávame en tu sangre, Señor,
Y más blanco que nieve seré.