Llueve, llueve
En las naciones
Que fluya sanidad
Y bendición.
Llueve, llueve
En nuestras vidas
Que el río de Dios
Inunde el mundo desde hoy.
Levantamos nuestra alma
Y nuestro corazón
Un clamor desesperado
Por tu bendición.
Nuestros ojos quieren verte
En esta nación
Y queremos escuchar
Y obedecer tu voz.
Tenemos hambre y sed
Sácianos con tu poder.
Las ventanas de los cielos
Pronto de abrirán
Las familias de la tierra
A ti volverán.
Nuestros corazones
Quieren adorarte más
Y tus hijos buscaremos
Más tu santidad.