El ya no ve la luz
por las huellas de un pasado mal jugado
que vistió de lagrimas su honor.
Ve los días pasar
en las crueles rejas que recuerdan
allí en donde está y también por qué.
Pero allí conoció una libertad que fue mayor
cuando aceptó al que lo perdonó.
Libres, somos por aquel que dio su vida,
derramó su sangre por amor, Él lo demostró
y a pesar de todo, libres.
El puede ver la luz
porque aquel que lo recibe vive libre
a pesar de toda condición.
Dios nos dejó su paz
para que podamos compartir la vida
y saber cuál es la única verdad.
Libres, ya no hay mas cadenas en el alma
la única verdad nos transformó
y en la adversidad Dios nos hace aún libres
Libres somos por aquel que en una cruz se entregó.
Libres somos por aquel que tanto, tanto nos amo.
Inocente, inocente.